15 ejemplos de efectos de espectador
El efecto espectador se refiere a una situación de emergencia en la que las personas que presencian la emergencia no ofrecen ayuda. Es un fenómeno social causado por la dinámica de grupo, el pensamiento de grupo y la desindividuación.
Este fenómeno fue investigado por primera vez por los psicólogos sociales Darley y Latané en 1968 después de un evento ampliamente publicitado del efecto espectador que tuvo lugar en la ciudad de Nueva York.
Aunque a la mayoría de las personas les gustaría pensar que ayudarían a una persona inocente en una emergencia, resulta que existen numerosos factores que disminuyen la probabilidad de ayudar.
Como ha delineado la investigación de Darley y Latané durante varios años, la presencia de otros testigos crea una difusión de la responsabilidad.
La difusión de la responsabilidad se refiere al hecho de que cuanta más gente esté presente, menos responsabilidad siente cada uno.
“Cuando hay varios observadores presentes, sin embargo, las presiones para intervenir no se concentran en ninguno de los observadores; en cambio, la responsabilidad de la intervención es compartida entre todos los espectadores y no es exclusivo de nadie. Como resultado, nadie ayuda” (Darley & Latané, 1968, p. 378).
Además, la falta de interpretación de la situación como una emergencia también puede verse afectada por las reacciones de los demás. Si nadie parece estar en pánico, entonces cada persona malinterpreta el asunto como si no fuera una emergencia, esto se conoce como ignorancia pluralista.
Ejemplos de efectos de espectador
- La emergencia del restaurante: Una persona en un restaurante abarrotado comienza a toser ruidosamente, pero otros clientes continúan cenando y no ayudan.
- El peatón lesionado: Un individuo yace inmóvil al costado de una carretera muy transitada. Mientras pasan muchos autos, nadie se detiene para ver si el individuo necesita ayuda.
- El nadador angustiado: En una playa llena de gente, un señor mayor lucha por llegar a la orilla y se cae mientras lucha por superar las olas que lo siguen derribando.
- La emergencia del gimnasio: Un hombre en el gimnasio está haciendo press de banca pero no puede levantar la barra lo suficientemente alto como para descansar sobre las clavijas. Otros miembros del gimnasio no toman medidas porque nadie está realmente seguro de si quiere ayuda o no.
- El ladrón a la luz del día: Un hombre corre por la calle con un celular en la mano mientras es perseguido por otro hombre. La gente en la calle no está segura de lo que está pasando, por lo que nadie toma medidas.
- La policía en pánico: Un grupo de policías está acurrucado fuera del salón de clases donde un individuo solitario amenaza con disparar. Los oficiales parecen estar "congelados" y buscan a su líder para recibir instrucciones sobre qué hacer.
- El pánico de la piscina: Un niño en una piscina pública agita los brazos y grita. Pero todos a su alrededor no actúan porque muchos niños gritan y salpican agua.
- El altercado físico: Tres amigos pasan junto a un hombre y una mujer que tienen una fuerte discusión, empujándose y dándose empujones. Ninguno de los amigos parece darse cuenta de que está ocurriendo un altercado físico justo en frente de ellos.
- El vagabundo: Cuando un oficinista dobla la esquina de camino al trabajo una mañana de invierno, se da cuenta de que una persona sin hogar y sin zapatos pide ayuda. Todos simplemente siguen caminando y nadie ofrece ayuda.
- El niño que llora: Un niño en un centro comercial llora a gritos mientras está solo en medio del vestíbulo. Los compradores ocupados siguen caminando mientras todos asumen que el niño está molesto con su madre.
Estudios de caso del efecto espectador
1. El caso Kitty Genovese
Tarde en la noche del 13 de marzoelEn 1964, una mujer de 28 años fue brutalmente atacada en un callejón a pocos pasos de la puerta de su apartamento en la ciudad de Nueva York. Aunque gritó pidiendo ayuda en numerosas ocasiones, ninguna de las 38 personas que escucharon sus gritos de ayuda intentó salvarla. Se hizo una llamada a la policía, pero fue descartada como una “disputa doméstica”.
El caso pronto llamó la atención de los medios nacionales y provocó indignación y condena de los residentes que no actuaron.
Muchos académicos, políticos y líderes comunitarios de todo el país respondieron con culpas y acusaciones de lo que sucede cuando las personas viven en las grandes ciudades; se vuelven seres humanos insensibles e indiferentes.
Este fue el caso que luego detonó la investigación de Darley y Latané. Durante las décadas posteriores, se llevó a cabo una gran cantidad de estudios científicos en un intento por comprender cómo las personas pueden dejar de actuar en situaciones de emergencia.
Los resultados fueron menos sobre señalar con el dedo y más sobre identificar difusión de la responsabilidad y ignorancia pluralista como dos factores clave que explican cómo y por qué las personas a menudo no toman medidas en circunstancias similares.
2. Intervención de espectadores: el primer estudio
Latané y Darley (1968) realizaron el primer estudio científico sobre el efecto espectador.
Su metodología era sencilla. Más de 60 estudiantes universitarios de la Universidad de Nueva York participaron en un estudio sobre “problemas personales en la universidad”. Cada participante fue llevado a una pequeña sala individual donde discutirían el tema a través de un sistema de intercomunicación.
Las pequeñas salas estaban situadas a lo largo de un estrecho pasillo, por lo que estaba claro que varios participantes estarían involucrados en la discusión simultáneamente.
Cuando un “participante” habló, mencionó sus dificultades para adaptarse a la vida universitaria y una condición médica que tenían que a veces resultaba en convulsiones. Este guión estaba pregrabado e incluía un incidente en el que el "participante" comenzó a mostrar una angustia física significativa y, finalmente, dejó de comunicarse.
Los resultados revelaron que:
“El número de transeúntes que el sujeto percibía como presentes tuvo un efecto importante en la probabilidad con la que reportaría la emergencia (Tabla 1). El ochenta y cinco por ciento de los sujetos que pensaron que solo ellos sabían de la difícil situación de la víctima informaron la convulsión antes de que la víctima fuera cortada, solo el 31% de los que pensaron que otros cuatro transeúntes lo hicieron". (pág. 379).
Esto indica que cuantos más “testigos” de una emergencia, menos probable es que una persona tome medidas. Apoyando así el concepto de difusión de la responsabilidad.
3. Intervención de ciberespectadores y ciberacoso
Según el Pew Research Center (2011), más del 90% de los adolescentes de 12 a 19 años acceden a Internet a diario. Con base en estadísticas de la Centro de Investigación de Ciberacosoen 2021, “El 23,7 % de las niñas y el 21,9 % de los niños de entre 13 y 17 años afirman haber sufrido ciberacoso”.
Mientras que los espectadores son individuos que no intervienen en situaciones de emergencia, los ciberespectadores lo hacen en el mundo virtual (Dillon & Bushman, 2015). Para examinar la ciberpercepción en línea, los investigadores hicieron que 221 estudiantes universitarios participaran en un estudio sobre encuestas de investigación en línea.
Se veía una ventana de chat en el monitor de la computadora mientras los participantes completaban la encuesta. En momentos clave, la ventana de chat reveló comentarios de uno de los "otros participantes" que actuó confundido con respecto a los procedimientos. Sus comentarios fueron recibidos con respuestas cada vez más hostiles de otro participante ficticio.
Los resultados revelaron que “De los 221 ciberespectadores, solo el 10,4% (n = 23) intervino directamente frente al 88,24% (n = 198) de ciberespectadores que no intervinieron directamente” (pág. 148).
Solo un participante informó el incidente de ciberacoso al investigador en el sitio, en un momento, abrió la puerta del laboratorio y se negó a continuar participando.
4. El modelo de intervención del espectador
Latané y Darley (1970) desarrolló un modelo de 5 etapas que explica cuándo y si intervendrá un espectador.
- Paso 1 es que la situación debe ser notada. Si el transeúnte no puede ver lo que está sucediendo, no se producirá ninguna intervención.
- Paso 2 es que el espectador debe interpretar con precisión la situación como una emergencia. Esto se ve afectado en parte por las reacciones de otras personas que también presencian la situación.
Si los demás no parecen estar actuando como si el asunto fuera una emergencia, entonces la situación no se interpretará correctamente (es decir, ignorancia pluralista).
Si identifican la situación como una emergencia, entonces pueden pasar al Paso 3 y tener un sentido personal de responsabilidad. Sin embargo, a medida que aumenta el número de testigos, el sentido de responsabilidad personal disminuye (es decir, la difusión de la responsabilidad)
Si el espectador se siente responsable, entonces debe determinar si tiene o no las habilidades para brindar la ayuda adecuada (Paso 4). Eso conducirá a una final, decisión consciente de proporcionar ayuda, o no (Paso 5).
Un gráfico que representa el modelo se puede ver aquí.
5. Investigación sobre la intervención del maestro espectador
Hay tres formas de intimidación tradicional: física, verbal y relacional. El acoso físico implica daño físico directo; el acoso verbal implica burlas e insultos; y el acoso relacional implica dañar la reputación de una persona. En cada uno de estos escenarios, los docentes pueden desempeñar un papel importante como espectadores con autoridad para intervenir.
Eldridge y Jenkins (2020) examinaron el papel de la empatía del maestro en cada paso del Modelo de intervención del espectador (Latané & Darley, 1970).
Hubo 150 maestros que participaron en una encuesta por correo electrónico que incluía una medida del modelo de intervención de espectadores y empatía afectiva.
“El estudio actual encontró que los maestros reportan puntajes más altos en cada paso del modelo de intervención del espectador para el acoso tradicional que para el acoso cibernético” (pág. 6).
“…la empatía afectiva se relacionó positivamente con la percepción tanto del acoso tradicional como del ciberacoso” (pág. 7). Sin embargo, “No hubo una asociación significativa entre la empatía afectiva y la interpretación del ciberacoso como una emergencia” (pág. 8)
“Los docentes con mayor empatía afectiva informaron una mayor probabilidad de aceptar la responsabilidad de intervenir en eventos tanto de acoso tradicional como de ciberacoso” (pág. 8).
Finalmente, mientras que los docentes con altos niveles de empatía eran más propensos a saber qué hacer con el acoso tradicional, este no era el caso con el ciberacoso.
Conclusión
El efecto espectador es cuando los testigos de una situación de emergencia no intervienen. Esto puede deberse a varios factores, que se describen en el Modelo de intervención de espectadores.
Hay un proceso de toma de decisiones de 5 pasos que debe ocurrir antes de que un individuo intervenga o no. A menudo, la decisión se ve afectada por una interpretación de la situación como una emergencia real. Si es así, entonces el número de otros testigos presentes reduce el sentido de responsabilidad personal que cada uno siente.
Si una persona se siente responsable, entonces debe haber un análisis de su capacidad para ayudar. Si una persona no tiene las habilidades para intervenir con éxito, es menos probable que lo intente.
La era de Internet ha llevado a un número sustancialmente mayor de escenarios de intervención que ocurren a medida que los casos de ciberacoso se vuelven cada vez más frecuentes en la sociedad.
A la mayoría de nosotros nos gusta pensar que ayudaríamos a otra persona en evidente angustia, pero ese podría no ser el caso.
Referencias
Darley, JM y Latané´, B. (1968). Intervención del espectador en emergencias: Difusión de responsabilidad. Revista de Personalidad y Psicología Social, 8377–383.
Dillon, K. y Bushman, B. (2015). ¿Insensible o desapercibido?: Intervención de ciberespectadores en un contexto experimental de ciberacoso. Computadoras en el comportamiento humano, 45, 144-150. http://doi.org/10.1016/j.chb.2014.12.009
Eldridge, M. y Jenkins, L. (2020). El modelo de intervención del espectador: intervención del maestro en el acoso tradicional y cibernético. Revista Internacional de Prevención del Bullying, 2(3), 1-11. https://doi.org/10.1007/s42380-019-00033-7
Hortensius, Ruud y De Gelder, Beatrice. (2018). De la empatía a la apatía: el efecto espectador revisado. Direcciones actuales en ciencia psicológica, 27(4), 249-256.
Latané, B. y Darley, JM (1968). Inhibición grupal de la intervención de espectadores en emergencias. Revista de Personalidad y Psicología Social, 10, 215–221. http://dx.doi.org/10.1037/h0026570
Latané, B. y Darley, J. (1970). El transeúnte que no responde: ¿Por qué no ayuda? Nueva York: Appleton-Century-Crofts.
Lea, M. y Spears, R. (1991). Comunicación mediada por ordenador, desindividuación y toma de decisiones en grupo. Revista Internacional de Estudios Hombre-Máquina, 34283–301.
Centro de Investigación Pew (2011). Proyecto Internet y Vida Americana 2011: Adolescente/Padre.
Encuesta, del 19 de abril al 14 de julio de 2011. http://www.pewinternet.org/Trend-Data-(Teens)/Online-Activites-Total.aspx
Centro de Investigación Pew (octubre de 2014). Acoso en línea. http://www.pewinternet.
org/2014/10/22/acoso-en-linea/
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