Moratoria de identidad: 10 ejemplos y definición

La moratoria de identidad es un período de exploración y experimentación como búsquedas individuales de un sentido de identidad. Durante este tiempo, pueden adoptar y descartar diferentes roles para descubrir cuál encaja mejor con ellos.
Esta teoría fue propuesta por primera vez por James Marcia, como un desarrollo de la teoría de la identidad de Erik Erikson. Él creía que durante la adolescencia, las personas deberían tomarse el tiempo para explorar los diferentes roles que pueden asumir como adultos.
Por ejemplo, una adolescente puede experimentar con diferentes estilos de moda, pasatiempos y actividades extracurriculares para determinar sus intereses.
También puede participar en diferentes grupos sociales y entablar diversas conversaciones para evaluar qué valores son importantes para ella.
Al explorar y experimentar con diferentes opciones, eventualmente puede establecer una identidad que resuene con ella.
Entonces, la moratoria de identidad ayuda a identificar los verdaderos intereses, valores y metas del individuo y le permite distinguir su propia identidad de la de los demás.
Definición de moratoria de identidad
La moratoria de identidad es un período de exploración, autodescubrimiento y experimentación en el que un individuo puede adoptar diferentes roles para descubrir su identidad. (Louw et al., 1999).
Durante la etapa de moratoria de identidad, los individuos aún no están firmemente apegados a ningún rol o imagen en particular y comienzan a explorar diferentes aspectos de sí mismos.
Pueden experimentar con diferentes estilos de vida, valores, intereses, pasatiempos, grupos y relaciones para obtener una idea de su verdadero yo.
Erikson (1968) definió la moratoria de identidad como:
“…una especie de tiempo fuera durante el cual los adolescentes experimentan con diferentes roles, valores, creencias y relaciones” (Rathus, 2021. p. 530).
Como afirma Rathus (2021),
“…durante la moratoria, los adolescentes pasan por una crisis de identidad, en la que examinan sus valores y toman decisiones sobre sus roles de vida” (p. 530).
Por ejemplo, pueden hacerse preguntas: ¿Quién soy yo? ¿Qué tipo de persona quiero ser? ¿Qué valoro en la vida? ¿Qué carrera quiero seguir?
Desde una perspectiva científica, la moratoria de la identidad se asocia con la autoconciencia y la autorregulación.
Específicamente, los individuos en esta etapa son más conscientes de sí mismos y de su entorno, lo que les permite involucrarse en un comportamiento dirigido a objetivos para alcanzar una identidad deseada (Bamberg et al., 2021).
Además, la autorregulación permite a las personas tomar decisiones adecuadas que contribuyen aún más a la formación de la identidad.
La transición de esta etapa a la siguiente se conoce como "logro de la identidad" cuando el individuo se asienta en un sentido central autoconsistente en diferentes contextos. Esta claridad puede darles más confianza y permitirles vivir auténticamente.
Simplemente, una moratoria de identidad es un período de exploración y experimentación en el que los adolescentes buscan su verdadera identidad.
10 ejemplos de moratoria de identidad
- Explorando la moda: Experimentar con diferentes estilos de moda, como mezclar y combinar colores y patrones, para reflejar una imagen o estética deseada.
- Probar nuevos pasatiempos: Explorar diferentes pasatiempos e intereses, como las artes marciales o la música, para determinar cuáles brindan más alegría y emoción.
- Unirse a nuevos grupos sociales: Participar en diferentes grupos sociales, como organizaciones estudiantiles o comunidades religiosas, para obtener información sobre diferentes sistemas de valores y creencias.
- Exploración de trayectoria profesional: Probar varias trayectorias profesionales para determinar cuál se adapta mejor a sus intereses y pasiones.
- Viajando por Insight: Viajar a nuevos lugares para obtener una perspectiva de cómo otras personas viven sus vidas y qué tipo de estilo de vida llevan.
- Experimentación de relaciones: Experimente con diferentes tipos de relaciones románticas y platónicas para comprender mejor la naturaleza de las conexiones entre humanos.
- Superación de los límites personales: Participar en actividades que empujan los límites personales para aprender más sobre los propios límites, miedos, capacidades y fortalezas.
- Explorando varios campos educativos: Seguir caminos educativos que desafíen los conocimientos actuales y les permitan desarrollar nuevas ideas o teorías sobre el mundo que les rodea.
- Voluntariado por varias causas: Ofrecerse como voluntario para causas esenciales para obtener una mayor comprensión de lo que más importa en la vida y cómo pueden contribuir de manera efectiva para lograrlo a través de sus talentos y habilidades.
- Divergencia de las normas sociales: Pensar críticamente sobre las normas sociales para poder formar sus propias opiniones sobre lo que está bien o mal para ellos sin sucumbir a las presiones externas.
Orígenes de la moratoria de identidad
La teoría de la moratoria de la identidad fue propuesta por primera vez por el psicólogo Erik Erikson en su innovador trabajo, "Identity and the Life Cycle". (Erikson, 1994).
En este libro, Erikson (1994) postula que un individuo pasa por un período de exploración y experimentación desde la adolescencia tardía hasta la adultez temprana (entre los 15 y los 25 años), conocida como la “etapa de formación de la identidad”.
Durante este período, las personas aún no están firmemente apegadas a ningún rol o imagen en particular, lo que les permite probar diferentes estilos de vida, valores, intereses, pasatiempos, grupos y relaciones.
Esta exploración les ayuda a comprender mejor su verdadero ser y a desarrollar un sentido básico de identidad que se mantendrá constante en diferentes contextos (Erikson, 1994).
En la década de 1960, el renombrado psicoanalista James Marcia amplió las teorías de Erik Erikson sobre el desarrollo de la identidad adolescente al introducir cuatro “estados de identidad”, siendo la difusión de la identidad uno de ellos.
Psicólogos y sociólogos han aceptado ampliamente la idea planteada por Erickson. Desde su lanzamiento al público en 1959, este concepto se ha mantenido vital hasta el día de hoy.
Como herramienta para comprender la evolución del yo, ofrece una idea de cómo cada individuo experimenta el crecimiento personal y emprende la exploración para desarrollar una conexión personal genuina consigo mismo.
Etapas de la formación de la identidad
La identidad es un proceso en constante evolución, con diferentes etapas que ocurren en diferentes puntos de la vida de una persona. Marcia propuso cuatro fases conceptuales de identidad: difusión de identidad, revelación de identidad, moratoria de identidad y logro de identidad.
Cada fase refleja un nivel diferente de desarrollo en el sentido de sí mismo del individuo.
- Difusión de identidad Es la etapa inicial en la que el individuo todavía tiene que desarrollar un sentido claro de sí mismo. Se caracteriza por la confusión y la falta de dirección, ya que el individuo puede no estar seguro de quién es o qué quiere de la vida.
- Divulgación de identidad sigue después de esta etapa e implica el desarrollo de pistas sobre el verdadero yo y los deseos de uno. Podría incluir explorar diferentes estilos de vida o intereses para determinar qué se adapta mejor a ellos como individuos. Si esto no tiene éxito, puede caer en una exclusión de identidad.
- Moratoria de identidad se refiere al período desde la adolescencia tardía hasta la edad adulta temprana en el que los individuos exploran y experimentan activamente con varios aspectos de sí mismos sin comprometerse firmemente o identificarse permanentemente con una cosa en particular. En esta etapa, las personas son libres de probar diferentes roles o valores antes de decidirse por lo que les resulte más cómodo a largo plazo.
- Logro de identidad Ocurre cuando el individuo ha encontrado claridad en sus valores y creencias, lo que resulta en una sólida comprensión de su yo auténtico que se mantiene constante en todos los contextos.
Entonces, cada una de estas fases tiene su propio significado en la vida de uno, y es importante adquirir todas las etapas para obtener el logro de la identidad (Erikson, 1994).
Importancia de la moratoria de identidad
La moratoria de la identidad es una parte esencial del proceso de formación de la identidad, proporcionando a las personas un período de exploración y experimentación.
Este período marca un paso crucial en el desarrollo de la autoconciencia del individuo y la comprensión de sus valores, metas y aspiraciones personales (Yoon, 2015).
La importancia de la moratoria de identidad radica en su capacidad para permitir que las personas prueben diferentes estilos de vida sin sentirse obligados o comprometidos con nada.
Por ejemplo, esto podría incluir probar diferentes pasatiempos o intereses, explorar entornos sociales alternativos o participar en otras actividades que les permitan comprender mejor sus propias creencias, preferencias y sentido de sí mismos.
Además de permitir la experimentación dentro En varios escenarios, la etapa de moratoria de identidad también puede permitir que los individuos reflexionen y consideren cuestiones importantes de la vida (Erikson, 1994).
Estos pueden incluir: ¿Quién soy? ¿Cuáles son mis pasiones? ¿Estoy feliz y satisfecho con mi estilo de vida actual? Estos momentos de reflexión pueden ser increíblemente valiosos para ayudar a las personas a determinar qué quieren de la vida y cuál es la mejor manera de lograrlo.
En general, la moratoria de identidad es una fase importante en el desarrollo de un fuerte sentido de sí mismo que se mantendrá constante a lo largo del tiempo.
A través de esta etapa de exploración y reflexión, las personas pueden comenzar a construir los cimientos de sus futuras identidades.
Crítica a la Moratoria de la Identidad
Aunque la moratoria de la identidad puede ser una parte valiosa de la formación de la identidad, también tiene inconvenientes potenciales, como la confusión, el estancamiento o incluso un falso sentido de identidad.
Una de las críticas a la moratoria de la identidad es que puede generar sentimientos de confusión e incertidumbre. Con la abundancia de opciones durante esta etapa, las personas pueden tener dificultades para tomar decisiones y sentirse abrumadas por la complejidad de sus opciones.
Como resultado, pueden quedar atrapados en el limbo y no poder avanzar en su viaje hacia el autodescubrimiento (Becht et al., 2017).
Otra crítica es que la identidad personal puede cambiar drásticamente con el tiempo debido a la exposición a nuevas experiencias o entornos, lo que podría alejar a las personas de sus metas e ideales iniciales.
Esto podría crear una disonancia entre lo que un individuo valoraba inicialmente pero luego decidió abandonar, lo que genera conflictos internos que pueden ser difíciles de resolver.
Además, las personas corren el riesgo de dejarse llevar por diferentes intereses y estilos de vida sin considerar los efectos a largo plazo en su sentido de sí mismos o en los que los rodean.
Algunos han argumentado que la moratoria de la identidad puede volverse contraproducente y dañina si se lleva demasiado lejos. Por ejemplo, participar en comportamientos extremos sin comprender completamente sus implicaciones o consecuencias (Anisa, 2014)
Por lo tanto, si bien la moratoria de identidad puede ayudar a desarrollar un fuerte sentido de autoconciencia, debe hacerse de manera cuidadosa y responsable dentro de un período de tiempo razonable para no impedir el crecimiento personal.
Conclusión
La moratoria de identidad es una etapa crucial en el desarrollo de un individuo, que ofrece una oportunidad para la exploración, el autodescubrimiento y la experimentación.
Los conocimientos adquiridos al participar en este proceso permiten a las personas construir una identidad honesta e inmutable que sirve como guía para toda la vida.
Si bien es esencial reconocer los posibles inconvenientes y desafíos asociados con la moratoria de identidad, sigue siendo un período valioso de crecimiento y autoconciencia cuando se aborda de manera reflexiva y responsable.
Navegar por la moratoria de la identidad y, finalmente, alcanzar el logro de la identidad permite a las personas comprender quiénes son, qué valoran y cómo desean contribuir al mundo que los rodea.
Referencias
Anisa, J. (2014). Crisis de identidad. Nueva York: Morgan James Publishing.
Bamberg, MGW, Demuth, C. y Watzlawik, M. (2021). el manual de cambridge de identidad. Cambridge: Prensa de la Universidad de Cambridge.
Becht, AI, Nelemans, SA, Branje, SJT, Vollebergh, WAM, Koot, HM y Meeus, WHJ (2017). Incertidumbre de identidad y compromiso en la adolescencia: asociaciones dentro de la persona de cinco años utilizando informes de identidad diarios. Psicología del desarrollo, 53(11), 2103–2112. https://doi.org/10.1037/dev0000374
Erikson, EH (1994). La identidad y el ciclo de vida.. Nueva York: Norton.
Louw, DA, Ede, V., Louw, AE y Botha, A. (1999). Desarrollo humano. Los Ángeles: Kagiso Terciary.
Rathus, SA (2021). Viajes de infancia y adolescencia en el desarrollo.. Nueva York: Cengage Learning.
Yoon, S. (2015). Crisis de identidad. Londres: Wipf y Stock Publishers.
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